¿Tenemos éxito o hemos tenido suerte?
Cuando hablamos de éxito y de suerte la gente no quiere mezclar una palabra con la otra. Es más, el escritor estadounidense E.B. White dijo en más de una ocasión la celebre frase: “La suerte es algo que no puedes mencionar en presencia de los hombres que se han labrado su propio éxito”.
Tanto en la vida como en las apuestas la suerte juega un papel importantísimo y solo nos tenemos que ir a las declaraciones de deportistas, brokers, tipsters y demás personas para darnos cuenta de que el éxito que han tenido ha dependido, en parte, de la suerte.
¿Por qué la suerte es determinante?
La razón es fácil, miles de personas cuentan con las habilidades y las ideas pero no todos lo consiguen, a veces hay muchos aspectos que solo la suerte puede controlar. Pongamos un ejemplo.
Para ser un buen jugador de baloncesto es necesario mucho trabajo en mejorar la técnica, la puntería y los conocimientos del juego, pero también es fundamental tener la suerte de haber nacido con los genes adecuados. ¿Acaso alguien duda de que los genes de la familia Gasol les han ayudado a triunfar en el mundo del basket? Es cuestión de suerte.
Caso aparte es el del mítico escolta de los Philadelphia 76ers, Allen Iverson, que a pesar de su 1,83 consiguió convertirse en uno de los jugadores más decisivos de la historia de la NBA. ¿Alguien duda de que “tuvo que trabajárselo” más que si hubiese medido 2,23?
La suerte también puede ser fundamental la suerte cuando hablamos de juegos de azar puros, como la lotería. En otros, podemos influir en el factor suerte a través de la estadística.
La suerte nos acompaña pero el éxito también se debe a nuestra habilidad para optimizarla
Y es que no será lo mismo el resultado que consigue un jugador que apuesta siempre lo mismo, independientemente del factor riesgo que tenga delante, que el caso de un jugador que es capaz de calcular su margen de riesgo y beneficio en cada momento. En el bingo, por ejemplo, a hay partidas en las que resulta más fácil conseguir una buena prima que en otras. ¿No estás maximizando tu suerte si apuestas más en esos casos? ¿No estás maximizando tu suerte si estudias las estadísticas de un equipo antes de hacer una apuesta deportiva?
Cuando apuestas, cuando juegas o cuando te arriesgas a un color, la suerte es la que decidirá si ganas. Cuando lo hagas será el momento de reflexionar… ¿ha sido acaso una pura “cuestión de suerte”?